Austin TV, Woodser y el sushi de Oh Kiku

Austin TV
¿Qué harías si supieras que ésta es la última noche del mundo? Con esa pregunta como inspiración, unos amigos y yo realizamos, hace unos años, el cortometraje "La última noche del mundo". En parte inspirada en el segundo trabajo discográfico de la banda mexicana Austin TV, cuyo título es el mismo. Varios años después de ese episodio me encuentro a una semana de ver a Austin TV en vivo acá en Guatemala y esto ha hecho que dentro de mi revoloteen agitadamente los recuerdos de aquella época en la que ingenuamente intenté dirigir una película. La verdad es que el cortometraje fracasó enormemente y me pregunto si la visita de Austin TV el próximo viernes correrá la misma suerte. No lo creo. Hay varias razones por las cuales considero que el evento será exitoso. Primero, estamos ante la banda de rock independiente más importante de México. Segundo, para su tercer disco reclutaron en la producción a Emmanuel del Real (Café Tacvba) lo que los elevó a un estatus de banda "que hay que tomar en serio". Tercero, compartirán escenario con los guatematecos Woodser, una agrupación jóven que ha demostrado en varias ocasiones su enorme talento y tacto musical. Ahora bien, sé que muchos de quienes habitamos en este pequeño país desconocemos quiénes son Austin TV. No hay de qué preocuparse amigos. De hecho, ni siquiera es necesario que se aprendan una sola letra de sus canciones para disfrutarlos. Su rock instrumental hará algo mejor por ustedes: conducirlos por paisajes sonoros únicos. Aún así recomiendo que se den una vuelta por su página oficial y si pueden escuchen las siguientes canciones: Roy Rogers, Ella no me conoce y Olvidé decir adiós de La última noche del mundo (2003) y Marduk, Ana no te fallé y Shiva de Fontana Bella (2007). También es preciso escuchar su nuevo sencillo, El Hombre Pánico, del disco que los trae a Centro América, Caballeros del Albedrío (2011). 

Personeros de La última noche del mundo.

Trivia! ¿Qué es más fácil? ¿Pronunciar el nombre del mazo de Thor, Mjolnir ó el nombre del nuevo EP de Woodser, Existentialism is a Mennerism? Las entradas al concierto ya están a la venta en Miraflores (Rolling Store) y tienen un costo de Q 100.00 -incluye el nuevo EP de Woodser-. ¡Por ese precio y con esas dos bandas... empiecen a bajarse los pantalones! El concierto será en Vía 4 1-37 Zona 4 (Antiguo 4 grados norte) e iniciará a las 7:30 p.m. Ah! Y no olviden llevar ficha por si Austin TV pone discos a la venta.

Edición limitada de Fontana Bella... espero me la firmen.

Oh Kiku
¡No es tan Fast pero es Food y muy buena! ¿Les gusta el sushi? Todo el mundo sabe que el mejor sushi es el de la "20 calle". Pero ¿Cómo se llama? Oh Kiku. El restaurante de comida japonesa y taiwanesa que hace que todos los demás restaurantes del centro comercial se encuentren vacios. Con decirles que hay uno que ya no abre en la noche a causa de la enorme popularidad de Oh Kiku. ¿El mejor? Todos. ¿Mi favorito? El tempura roll y mejor si por Q 20.00 le agregan salmón ahumado. Sólo hay una cosa que debo advertir a los no conocedores. Si bien es cierto que las porciones grandes y que su precio y sabor le patean el trasero a Mr. Sushi y a Sushi Itto, el tamaño de sus rollos los hace muy difíciles de comer como Dios manda. Fuera de eso estamos bien. Ubíquenlo en la 20 calle 25-96 de la zona 10 (local 12).

Tempura roll "de lado".

Rock no more. Pizza... yes please.

Rock no more
El viernes pasado, la empresa organizadora de eventos Premier, me invitó a mi y a mi socio de El Circo del Rock, Edgar Zamora, a una reunión para discutir sobre algunos eventos de rock internacionales que podrían darse en nuestro país antes de que acabe el año. Por obvias razones no puedo compartir por este medio los eventos específicos que tocamos en la reunión pero si puedo mecionar que la gran pregunta en cada uno era ¿Cuántas personas asistirían? Para empezar, y por experiencia propia, debo aclarar que "traer" un artista o una banda y "montar" un evento en Guatemala no es cosa fácil. Primero están los impuestos que ya son muchos, incluyendo el de la AEI que te obliga a "donar" el 10% de lo que percibas en taquilla por concepto de pago de derechos de autor. Segundo, tenemos la inmensa cantidad de boletos de cortesía que debes dar a los medios de comunicación para que te apoyen comunicando tu evento -estoy hablando de decenas de boletos por medio- y que luego terminan en las manos de los revendedores a un precio mucho mayor que el de Q 1.00, haciendo perder al productor del evento grandes cantidades de dinero. Tercero, y esto aplica sobre todo en los conciertos de rock, no podemos dejar a un lado el chorro de idiotas que desean entrar al concierto sin pagar o que se tiran de una localidad a otra destruyendo lo que haya a su paso, poniendo en riesgo su propia vida y la de sus semejantes. Con preocupación veo los mensajes que han puesto los rockeros en el Fan Page de Premier y en su cuenta de Twitter. Han pasado de ser sugerencias a súplicas y de éstas últimas saltamos al insulto y al odio y repudio por una empresa que no hace más que responder a la demanda local, que en su gran mayoría desea escuchar música pop sentada, bajo techo, con parqueo, baños, comida caliente y una botella de ron. En otras palabras, prefieren Mundo E. Les digo, compañeros rockeros, que si por mi fuera que se vengan los Red Hot Chili Peppers, Limp Bizkit (que por cierto que buen vídeo se echaron), los Pearl Jam, Vicentico, AC/DC, Aerosmith, Caifanes, Zoé y System of a Down, pero hay que ser realistas. Tan sólo un par de los anteriormente mencionados superaría los tres mil asistentes pagados. De nuevo ¿Cuántas personas asistirían al concierto de un grupo que no tiene una sóla canción en alguna radio guatemalteca? ¿Cuántas personas asistirían al concierto de un grupo cuyo pago requiere que asistan por lo menos unas 8 mil o 10 mil personas con boleto pagado? ¿Cuántas personas asistirían al concierto de un grupo de rock como Limp Bizkit y luego asistirían al de Zoé o Vicentico promoviendo así una cultura musical y no de exclusión? Agosto nos trae a Woodser y Austin TV (de México) el 5 de agosto y Acordes de Paz para el día siguiente. ¿Asistiremos? Concluyo diciendo que nadie que no haya perdido por lo menos 20 mil dólares haciendo un concierto de rock debería opinar. Al menos no de la forma en la que se han expresado hasta el momento en las redes sociales.

Fred Durst 2099. ¡Qué viejo está el pobre!

Domino's
Hay dos nuevas pizzas en Domino's Pizza. La primera es la nueva Picona que trae jalapeño, cebolla y pepperoni. Edgar me dijo que estaba muy buena por lo que su palabra es más que suficiente para recomendarla. La segunda pizza es la igualmente nueva Tropicana con salami, piña y un toque de tocino-maple (así dice el volante que me dieron). Hay combos desde Q 95.00. Si ordenan una recomiendo que la pidan en masa "crosty". Recuerden, entre menos pan haya en una pizza, más realce tendrán los sabores de sus ingredientes.

Ésta es publicidad no pagada.

¡A pesar de la trans fat... I'm still alive!

Eres veneno vil, trans fat.
Desde hace un tiempo me di cuenta que la cantidad de productos que llevan impreso el mensaje "0 g. trans fat" va en aumento. ¿No han notado ese pequeño detalle en los productos que compran en el super o en sus hamburguesas? Son tantos los productos que traen dicha información ahora que me empezó, no sólo a inquietar sino también a preocupar, sobre qué jocotes es la trans fat y más importante aún ¿desde cuando la he consumido? Investigando un poco resultó que los ácidos grasos trans (por su nombre en español no deben ser muy buenos, ¿verdad?) nacieron el mismo año en que se formaron los Beatles. La fórmula de esta grasa -que es barata y efectiva- permite que nuestras donas duren semanas y no días, que nuestros Doritos sepan más ricos, que nuestras papas fritas hayan sido freídas en el mismo aceite que las hechas el día anterior y que nuestras galletas Oreo vivan por más tiempo que el General Ríos Montt. Pero el costo de consumir esta grasa ha sido alto: ella eleva el colesterol dañino en nuestro cuerpo mientras que baja nuestro colesterol beneficioso. Ahora bien, el asunto está lejos de terminar. Una ley en Estados Unidos permite a los fabricantes de alimentos decir que sus productos contienen "0 g. trans fat" (cero gramos) siempre y cuando tengan menos de 0.49 gramos. ¿No es acaso eso una vil mentira? Desde que tengo uso de memoria he comido en McDonald's y no me cabe en la cabeza la catidad de trans fat que he consumido al día de hoy. Tampoco me cabe en la cabeza que luego de casi 50 años al fin a alguien se le ocurrió que aquello que dure más de una semana fuera del refrigerador no es natural ni cosa de Dios. Una pequeña ayuda. Al comprar sus productos lean la lista de ingredientes. Si dice "parcialmente hydrogenado"... bueno... eso es sinónimo de trans fat.

Ejemplo de un producto "0 g Trans Fat"

Pearl Jam
Corría el año 2000 y yo escuchaba en casa uno de los discos que cambió mi vida: Live San Sebastian, de los jalea de perla. Puedo decir que a la fecha, la de Eddie ha sido la banda que más me ha impactado y gustado. Por aquella época yo era un pobre adolescente queriendo convertirme en hombre (o por lo menos en mayor de edad) pero tenía en mi cuarto a dos grandes compañeros: mi disco doble en vivo de Pearl Jam y mi JVC Kaboom! Ambos hicieron de aquellas noches las más inolvidables de mi época escolar. A diario colocaba el disco y creaba una lista distinta antes de dormir. Me quedaba dormido escuchándolo y al día siguiente iba a comprarme un disco nuevo de Pearl Jam. Así hice mi colección... en menos de dos semanas ya tenía todos los discos (que en esa época llegaban tan sólo al Binaural). Once años después recibimos la noticia de que la banda regresa a México y Costa Rica. Es tiempo de pagar mi deuda con la vida e ir a verlos. Sólo que ahora iré acompañado -espero yo- de personas que me importan mucho más que aquel disco y aquella radio -que aún poseo-. Así que espero con ansias algún día compartirles por acá mi sentimiento tras ver a mi banda favorita junto a mi esposa Ivette y mis amigos Mike, Edgar y Jorge Luis.

Mis dos viejos amigos...

Bob Dylan y una receta de regalo...

Highway 61 Revisited
¿Alguna vez te has bajado la discografía completa de algún artista y haz querido escucharla de un sólo tirón? ¿Sí? ¿No? Bueno, pues yo nunca lo he hecho. En mi caso lo más parecido sería comprar todos los discos de un mismo artista o banda de un sólo tirón. Eso si lo he hecho. Hace unos años me compré el Box Set de Pink Floyd "Oh, by the way", el cual contiene sus 14 álbumes de estudio y hace unas semanas recibí el Box Set "The original mono recordings" de Bob Dylan. En sí, la diferencia entre el primero y el segundo es que éste último contiene únicamente los primeros ocho discos de estudio de Dylan (sólo de estos tiene 34) y el de Pink Floyd los contenía todos. La verdad es que ya llevo unos cuantos años tratando de comprender la importancia de Dylan en la música moderna. He leído su libro, su bibliografía, he visto la película varias veces, he escuchado sus mayores éxitos y numerosos covers pero nunca sus discos más importantes... hasta ahora. Mi caja incluye su etapa inicial como cantante folk (y que conste que para los folklorista la música de Dylan era algo así como el rock para nosotros), es decir, los discos Bob Dylan (1962), The Freewheelin' Bob Dylan (1963), The times they are a-changing (1964) y Another side of Bob Dylan (1964). Incluye, gracias a Dios, su invaluable contribución al rock con los discos Bringing it all back home y Highway 61 Revisited (Ambos de 1965). La caja se completa con el importantísimo doble disco Blonde on blonde (1966) y su John Wesley Harding (1967).

También hay una versión en vinilo de este Box Set.

De todos -y sé que no sorprenderé a ninguno- mi favorito hasta el momento es Highway 61 Revisited. Tras escucharlo no me ha quedado duda alguna sobre el rol del disco y de Dylan en la historia de la música moderna. En él encontramos la que fuera elegida la mejor canción de todos los tiempos - los últimos 70 años de música probablemente- según Rolling Stone, VH1 y muchos otros: Like a rolling stone. Incluye también las rockeras y subterraneas "Tombstone blues", "Highway 61 revisited" y "Just like Tom thumb's blues". La fuerte "A ballad of a thin man" (versionada por Bunbury y Stephen Malkmus -que es muy superior-) y la apoteósica "Desolation row". Me alegro mucho de poseer esta pequeña colección y este discazo que sé escucharé una y otra vez cual vinilo. E invito a que conozcan más de éste extraordinario músico que aún está con vida.

Para conocer más sobre Bob Dylan... escúchenlo.

La receta prometida...
Me compré un libro llamado Eat this, not that. Su objetivo es proveer la información necesaria para que los consumidores de comida rápida -osea nosotros- puedan elegir de forma inteligente sus alimentos y puedan de esta manera tener una vida más saludable. ¿Cuántos han ido a Chili's? ¿Han probado la Buffalo Chicken  Ranch Sandwich? Sé que yo sí la he comido y se muy bien que mi amigo Edgar la comió en dos ocasiones. Pues les cuento que sólo el emparedado tiene 1,560 calorías!!! WTF??? Simón... yo pensé lo mismo. Eso es prácticamente tres cuartos de la cantidad diaria de caloría que necesitamos.  TRES CUARTOS. A su Buffalo Chicken  Ranch Sandwich súmenle las papas, la coca cola (o cerveza), el postre, la entrada, etc. ¿Resultado? Obesidad. De nuevo. El Buffalo Chicken  Ranch Sandwich de Chili's contiene 1,560 calorías, 86 gramos de grasa (14 de ellos grasa saturada) y 4,010 miligramos de sodio. Eat this, not that nos proveyó de la receta para preparar en casa el mismo producto pero utilizando ingredientes frescos y aunque no lo crean, ninguno de ellos necesitaba ser bajo en grasa. ¡Así que mi esposa y yo fuimos al "super" y resultamos almorzando una de las mejores hamburguesas de pollo con salsa búfalo y blue cheese que hayamos comido nunca! ¿Y lo mejor de todo? ¡Consumimos únicamente 387 calorías, 15 gramos de grasa (sólo 5 de ellos saturada) y 872 miligramos de sodio! No sólo nos ahorramos  1,173 calorías. No, señor. También nos ahorramos un montón de dinero. Entonces, la receta:


Ingredientes para 4 hamburguesas:
1/4 de taza de quezo blue cheese. 1/2 taza de yogurt natural. El jugo de medio limón. Sal y pimienta al gusto. 4 pechugas de pollo (de 6 onzas cada una). 1/2 cucharada de pimentón rojo en polvo. 1 cebolla rodajada. 1 cucharada de salsa Tabasco. 2 cucharadas de mantequilla (derretidas en el microondas). 4 hojas de lechuga romana y 4 "panes" para hamburguesa con ajonjolí.

Preparación:
Precalienten una sartén. Mientras, en un bowl -si no saben que es un bowl pregúntenles a sus novias o madres respectivas- combinen el blue cheese, el yogurt y el jugo de limón, además de un poco de sal y pimienta. Agiten para combinar y apártenlo. Sazonen las pechugas de pollo con sal, pimienta y el pimentón rojo. Coloquen las pechugas en la sartén y cocínenlas de 4 a 5 minutos por lado. Luego de cocidas remúevanlas y coloquen la cebolla rodajada en la misma sartén y cocinen hasta que queden tiernas. En otro bowl -ahora ya saben que és- combinen la mantequilla derretida con la salsa tabasco y únten la combinación sobre cada pechuga con una brocha -de cocina muchá-. Coloquen sobre el pan de hamburguesa -tostado queda mejor- la lechuga, la pechuga de pollo y sobre ésta una cucharada de salsa blue cheese, las cebollas y finalmente el otro pan. ¡Disfruten!

Mi esposa me cocina rico... ¿Y la tuya?

NOTA: Cada Buffalo Chicken  Ranch Sandwich de Chili's les costaría alrededor de Q 80.00 más o menos. Nosotros gastamos menos de Q 150.00 en todos los ingredientes y podríamos haber hecho cinco hamburguesas.

PS. No se pierdan la próxima semana: ¡El ataque de la Trans Fat!

Servicio al cliente...

El Duende, crónica de la decepción.
Miles de tiendas de discos alrededor del mundo cierran sus puertas debido, en gran parte, a las pésimas decisiones tomadas por las disqueras en la última década (en respuesta a la piratería y al libre movimiento de música en Internet) y a las recientes crisis económicas mundiales. ¡En Guatemala no existe una sóla tienda de discos decente! La más cercana actualmente es El Duende. Tienda que nos ha acompañado durante muchos años en nuestras aventuras y desventuras musicales. Tienda que se ha ido adaptando a las condiciones del mercado local disminuyendo considerablemente el tamaño de sus tiendas, reubicándolas, ofreciendo productos computacionales, libros de fácil digestión, discos a precios exorbitantes, videojuegos y contratando a personal poco calificado en el conocimiento de sus propios productos (por no decir que no saben ni un pelo de música, la mayoría) e incapaces de resolver problemas básicos de servicio al cliente. Hace unas semanas compré un disco allí. Fue un viernes. Uno de los empleados me dijo si te interesa a partir de mañana tendremos ofertas. ¡Hasta 9 discos por Q 250.00! Ver para creer pensé. Al día siguiente regreso y me entero que el Sale iniciaría hasta el martes o miércoles. El miércoles me dijeron que no sabían cuando empezaría. El lunes siguiente pasé al que era mi Duende favorito: el de Peri Roosevelt -Mi amigo Mike me informó que las ofertas habían iniciado-. Ahí me entretuve un rato viendo todos los discos que tenían rebajados a Q 59.00. La verdad no había nada que valiera remotamente la pena. Algunos discos como el doble en vivo de R.E.M. estaban a Q 118.00 (OJO: Eran Q 59.00 por disco). Lo que no saben en El Duende es que por menos de Q 118.00 puedo conseguirme el mismo disco en Amazon. Lo único que tengo que hacer es esperarme cuatro días. Luego encuetro un DVD doble de Tom Petty & The Heartbreakers que tenía una eqtiqueta que decía Q 59.00. Cuando llego a la caja el chavo (porque no llegué a considerarlo más que eso) me dijo que como era doble entonces debía pagar Q 118.00. Yo le dije que la etiqueta dice claramente Q 59.00. Él me contestó que seguro se habían equivocado al etiquetarlo. LIBRO DE QUEJAS por favor. Ahuevos no lo compré. Días después pasé por El Duende de Oakland y con ganas de darles una oportunidad más entré a ver. SORPRESA NO. 1 no había nada que valiera remotamente la pena excepto por SORPRESA NO. 2 ¡Oh por Dios, tienen el disco de Temple of the dog a Q 59.00! ¿Dónde está la caja? Puse mis 4 discos sobre ella y pregunto: ¿A cuánto están estos? A Q 59.00 cada uno me dijo el duendero. Me los llevo le contesté. Cuando me los cobra me dice, señalando el disco de Temple of the dog: Mmmm este cuesta Q 175.00, debieron haberse equivocado. ¿Qué p****? ¿Cómo puede un disco de 1991 costar Q175? ¡En Amazon está a USD $8.80! LIBRO DE QUEJAS por favor. Ahuevos no los compré.
Por todo lo que sé el Duende como tienda de discos está destinada a morir. Otra más que se irá al cielo de los artículos de consumo y placer auditivos y que se sentará allá junto a Discos y cosas, CD Warehouse e Insomnia. Q.E.P.D.

Fotografía de un duende real.

Ellos, Robots.
¿Se han dado cuenta de cómo nos hablan los motoristas de las entregas a domicilio cuando llegan a dejarnos nuestra pizza? ¿O cómo nos hablan cuando nos atienden en el autoservicio los cajeros de los restaurantes de comida rápida? Si, yo también lo he pensado. O son robots o les han lavado muy bien el cerebro. Me imagino que con el objeto de mejorar la atención al cliente las cadenas de restaurantes tomaron la decisión de entrenar a sus empleados hasta en su forma de hablarnos a nosotros los clientes. El problema es que se ha perdido algo muy valioso en ello: la interacción humana. ¡Juro que no hay nada que me caiga más mal que ser interrumpido mientras ordeno en el autoservicio! Ejemplo:

- Buenas tardes, bienvenido a McDonald's, ¿En qué le puedo servir?
- Buenas tardes... quisiera un menú no. 1 con coca cola sin hie...
- ¿Lo desea super agrandado?
- No, gracias... normal está bien. Le decía que la coca-cola sin hie...
- ¿Algún pastelito para acompañar?
- No, gracias. Le decía que sin hielo la coca cola por fav...
- Claro, con gusto. Serían Q 35.00 a pagar en la pri...
- ¡Mire! No he terminado. También quiero un McMenú de McNuggets...
- ¿Super agrandado su McMenú de McNuggets?
- No. Normales están bien. Este con seven up sin hiel...
- ¿Algún delicioso pastelito para acompañar? Le recomiendo el de manzana, está muy bueno.

Y así continúa la onda hasta que me dan mi orden con la coca cola y la seven up con tanto hielo que quema las manos.

¡Yes, sir!

PS. La Maga me preguntó el otro día "¿Cuándo vas a reseñar el Ukulele Songs?". ¡Pues ya! Pero antes de decir algo acerca del nuevo disco de Eddie Vedder debo decir que hay cierto conflicto de intereses acá. En parte porque soy tan fan de Eddie que a veces fantaseo con que el día de mi cumpleaños aparecerá en mi fiesta con su ukulele y me cantará el Happy Birthday. En fin... el nuevo disco no es nada nuevo ni del otro mundo. Es un tipo con un ukulele cantando canciones bonitas. 15 canciones completas conforman este disco. La mayoría de ellas no alacanza los tres minutos de duración. ¿Cuánto se le puede sacar a un Ukulele? Aparentemente no mucho. Hay varias canciones que te dan la sensación de "esa ya la escuché antes (en el mismo disco!!!)". Pero fuera de eso es el álbum perfecto para acompañarte mientras descansas en una hamaca, bajo una palmera y con una piña colada en la mano. ¡Claro! Hay canciones tristes pero ninguna como para cambiar tu piña colada por un whiskey barato. Recomiendo que se escuchen el disco Binaural de Pearl Jam del año 2000, donde Eddie interpreta desde ya una canción con un ukulele: Soon forget.

Creo que vi de estos en Amatitlán.